El mosquito Aedes aegypti transmite las tres enfermedades. Aquí, las
señales para reconocerlas. Según la Organización Panamericana de Salud,
todas estas patologías presentan síntomas similares.
Las transmite el mosquito Aedes aegypti, pero son tres enfermedades
distintas. Aprender a reconocer los síntomas y ser precavidos ante su
aparición o antes, para evitar estar en contacto con este mosquito, es
muy importante. A continuación especificaciones aportadas por la
Organización Panamericana de la Salud respecto a las tres enfermedades.
Dengue
El dengue presenta fiebre habitualmente más alta, así como dolores musculares más fuertes. Puede complicarse cuando cae la fiebre y se debe prestar atención a los signos de alarma, como el sangrado. La chikungunya, además de una fiebre más alta, presenta un dolor en las articulaciones más intenso y afecta manos, pies, rodillas, espalda. Puede llegar a incapacitar (doblar) a las personas para caminar y realizar acciones tan sencillas como abrir una botella de agua. El zika no presenta rasgos particularmente característicos, pero en la mayoría de los pacientes se observan erupciones en la piel y conjuntivitis.
Zika
La infección por el virus del zika es causada por la picadura de mosquitos infectados del género Aedes y suele generar fiebre leve, sarpullidos, conjuntivitis y dolores musculares. El virus fue aislado por primera vez en 1947 en el bosque de Zika, Uganda (África). Desde entonces, se ha encontrado principalmente en África y ha generado brotes pequeños y esporádicos también en Asia. Los síntomas más comunes del zika son fiebre leve y exantema (erupción en la piel o sarpullido). Suele acompañarse de conjuntivitis, dolor muscular o en las articulaciones, con un malestar general que comienza entre 2 y 7 días después de la picadura de un mosquito infectado.
Una de cada cuatro personas infectadas desarrolla los síntomas de la enfermedad y en quienes los padecen, la enfermedad es usualmente leve. Los síntomas son similares a los del dengue o de la chikungunya. Las complicaciones (neurológicas, autoinmunes) son poco frecuentes, pero se han descrito en los brotes de la Polinesia y más recientemente en Brasil.
Chikungunya
Es un virus que causa fiebre alta, dolor de cabeza, dolores en las articulaciones y dolor muscular, unos tres o siete días después de haber sido picado por un mosquito infectado. Aunque la mayoría de los pacientes tienden a sentirse mejor en los siguientes días o semanas, algunas personas pueden desarrollar dolores en las articulaciones y la rigidez articular de manera intermitente por meses. La enfermedad rara vez puede causar la muerte, pero el dolor en las articulaciones puede durar meses e incluso años para algunas personas.
Las complicaciones son más frecuentes en niños menores de 1 año y en mayores de 65 años y/o con enfermedades crónicas (diabetes, hipertensión, entre otras). No existe un tratamiento específico ni una vacuna disponible para prevenir la infección de este virus. Los brotes ocurren cuando muchos mosquitos y humanos se infectan.
Nuevas investigaciones
El virus del Zika está presente de forma activa en la orina y en la saliva humanas pero aún no hay evidencias de que estos dos fluidos puedan transmitirlo de una persona a otra, informó un centro científico brasileño. La presencia del virus en la orina y en la saliva fue detectada mediante exámenes de laboratorio en muestras de dos pacientes con zika hechas por científicos de la estatal Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), el mayor centro de investigación médica de América Latina.
"El hecho de que haya un virus activo con capacidad de infección a través de la orina y la saliva no es una comprobación aún, ni significa que necesariamente lo será, de que hay posibilidad de que se pueda infectar a otra persona de forma sistemática a través de esos fluidos", afirmó el presidente de la Fiocruz, Paulo Gadelha, en una rueda de prensa.
Una nueva investigación del Instituto Pasteur de París (Francia) publicada en la revista The Lancet establece un vínculo por primera vez entre el zika y el síndrome de Guillain-Barré, un trastorno autoinmune que afecta al sistema nervioso y desemboca en la parálisis progresiva de los músculos del cuerpo. También aseguraron que creen que 1 de cada 4.000 personas que padecen zika, podría desarrollar esta enfermedad.
Brasil informó sobre la detección de pacientes con síndromes neurológicos que tenían un historial reciente de infección por virus zika En concreto, las autoridades sanitarias identificaron a 76 pacientes con síndromes neurológicos, de los cuales 42 fueron confirmados como Guillain-Barré.
En enero de 2016, El Salvador, también, informó sobre la detección de un incremento inusual del síndrome autoinmune desde inicios de diciembre de 2015.
Este año la OMS reconoció la coincidencia "espacio-temporal" del zika y del síndrome de Guillain-Barré, pero a falta de más datos no estableció un vínculo directo entre ambos males. Prefirió recomendar a los países afectados por el zika que aumenten la vigilancia de esta enfermedad autoinmune y otros síndromes neurológicos, como el síndrome Fisher, la encefalitis, la meningitis y la meningoencefalitis.
Elimnar el mosquito transmisor es fundamental para prevenir estas enfermedades, es fácil, simple y económico. En sus manos está.
Cambio climático
Durante los últimos 50 años, la actividad humana, en particular el consumo de combustibles fósiles, ha liberado cantidades de CO2 y de otros gases de efecto invernadero suficientes para retener más calor en las capas inferiores de la atmósfera y alterar el clima mundial.
En los últimos 130 años el mundo se ha calentado aproximadamente 0,90 ºC. Durante los últimos 30 años cada década ha sido más cálida que cualquier década precedente desde 1850.
El nivel del mar está aumentando, los glaciares se están fundiendo y los regímenes de lluvias están cambiando. Los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más intensos y frecuentes.
A nivel mundial, el número de desastres naturales relacionados con la meteorología se ha más que triplicado desde los años sesenta. Cada año esos desastres causan más de 60 000 muertes, sobre todo en los países en desarrollo.
Las zonas con malas infraestructuras sanitarias -que se hallan en su mayoría en los países en desarrollo- serán las menos capacitadas para prepararse ante esos cambios y responder a ellos si no reciben ayuda.
Las condiciones climáticas tienen gran influencia en las enfermedades transmitidas por el agua o por los insectos, caracoles y otros animales de sangre fría.
Es probable que los cambios del clima prolonguen las estaciones de transmisión de importantes enfermedades transmitidas por vectores y alteren su distribución geográfica.
El paludismo depende mucho del clima. Transmitida por mosquitos del género Anopheles, el paludismo mata a casi 600 000 personas cada año, sobre todo niños africanos menores de cinco años.
Los mosquitos del género Aedes, vector del dengue, son también muy sensibles a las condiciones climáticas.
Los estudios al respecto llevan a pensar que el cambio climático continúe aumentando el riesgo de transmisión del dengue.
Dengue
El dengue presenta fiebre habitualmente más alta, así como dolores musculares más fuertes. Puede complicarse cuando cae la fiebre y se debe prestar atención a los signos de alarma, como el sangrado. La chikungunya, además de una fiebre más alta, presenta un dolor en las articulaciones más intenso y afecta manos, pies, rodillas, espalda. Puede llegar a incapacitar (doblar) a las personas para caminar y realizar acciones tan sencillas como abrir una botella de agua. El zika no presenta rasgos particularmente característicos, pero en la mayoría de los pacientes se observan erupciones en la piel y conjuntivitis.
Zika
La infección por el virus del zika es causada por la picadura de mosquitos infectados del género Aedes y suele generar fiebre leve, sarpullidos, conjuntivitis y dolores musculares. El virus fue aislado por primera vez en 1947 en el bosque de Zika, Uganda (África). Desde entonces, se ha encontrado principalmente en África y ha generado brotes pequeños y esporádicos también en Asia. Los síntomas más comunes del zika son fiebre leve y exantema (erupción en la piel o sarpullido). Suele acompañarse de conjuntivitis, dolor muscular o en las articulaciones, con un malestar general que comienza entre 2 y 7 días después de la picadura de un mosquito infectado.
Una de cada cuatro personas infectadas desarrolla los síntomas de la enfermedad y en quienes los padecen, la enfermedad es usualmente leve. Los síntomas son similares a los del dengue o de la chikungunya. Las complicaciones (neurológicas, autoinmunes) son poco frecuentes, pero se han descrito en los brotes de la Polinesia y más recientemente en Brasil.
Chikungunya
Es un virus que causa fiebre alta, dolor de cabeza, dolores en las articulaciones y dolor muscular, unos tres o siete días después de haber sido picado por un mosquito infectado. Aunque la mayoría de los pacientes tienden a sentirse mejor en los siguientes días o semanas, algunas personas pueden desarrollar dolores en las articulaciones y la rigidez articular de manera intermitente por meses. La enfermedad rara vez puede causar la muerte, pero el dolor en las articulaciones puede durar meses e incluso años para algunas personas.
Las complicaciones son más frecuentes en niños menores de 1 año y en mayores de 65 años y/o con enfermedades crónicas (diabetes, hipertensión, entre otras). No existe un tratamiento específico ni una vacuna disponible para prevenir la infección de este virus. Los brotes ocurren cuando muchos mosquitos y humanos se infectan.
Nuevas investigaciones
El virus del Zika está presente de forma activa en la orina y en la saliva humanas pero aún no hay evidencias de que estos dos fluidos puedan transmitirlo de una persona a otra, informó un centro científico brasileño. La presencia del virus en la orina y en la saliva fue detectada mediante exámenes de laboratorio en muestras de dos pacientes con zika hechas por científicos de la estatal Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), el mayor centro de investigación médica de América Latina.
"El hecho de que haya un virus activo con capacidad de infección a través de la orina y la saliva no es una comprobación aún, ni significa que necesariamente lo será, de que hay posibilidad de que se pueda infectar a otra persona de forma sistemática a través de esos fluidos", afirmó el presidente de la Fiocruz, Paulo Gadelha, en una rueda de prensa.
Una nueva investigación del Instituto Pasteur de París (Francia) publicada en la revista The Lancet establece un vínculo por primera vez entre el zika y el síndrome de Guillain-Barré, un trastorno autoinmune que afecta al sistema nervioso y desemboca en la parálisis progresiva de los músculos del cuerpo. También aseguraron que creen que 1 de cada 4.000 personas que padecen zika, podría desarrollar esta enfermedad.
Brasil informó sobre la detección de pacientes con síndromes neurológicos que tenían un historial reciente de infección por virus zika En concreto, las autoridades sanitarias identificaron a 76 pacientes con síndromes neurológicos, de los cuales 42 fueron confirmados como Guillain-Barré.
En enero de 2016, El Salvador, también, informó sobre la detección de un incremento inusual del síndrome autoinmune desde inicios de diciembre de 2015.
Este año la OMS reconoció la coincidencia "espacio-temporal" del zika y del síndrome de Guillain-Barré, pero a falta de más datos no estableció un vínculo directo entre ambos males. Prefirió recomendar a los países afectados por el zika que aumenten la vigilancia de esta enfermedad autoinmune y otros síndromes neurológicos, como el síndrome Fisher, la encefalitis, la meningitis y la meningoencefalitis.
Elimnar el mosquito transmisor es fundamental para prevenir estas enfermedades, es fácil, simple y económico. En sus manos está.
Durante los últimos 50 años, la actividad humana, en particular el consumo de combustibles fósiles, ha liberado cantidades de CO2 y de otros gases de efecto invernadero suficientes para retener más calor en las capas inferiores de la atmósfera y alterar el clima mundial.
En los últimos 130 años el mundo se ha calentado aproximadamente 0,90 ºC. Durante los últimos 30 años cada década ha sido más cálida que cualquier década precedente desde 1850.
El nivel del mar está aumentando, los glaciares se están fundiendo y los regímenes de lluvias están cambiando. Los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más intensos y frecuentes.
A nivel mundial, el número de desastres naturales relacionados con la meteorología se ha más que triplicado desde los años sesenta. Cada año esos desastres causan más de 60 000 muertes, sobre todo en los países en desarrollo.
Las zonas con malas infraestructuras sanitarias -que se hallan en su mayoría en los países en desarrollo- serán las menos capacitadas para prepararse ante esos cambios y responder a ellos si no reciben ayuda.
Las condiciones climáticas tienen gran influencia en las enfermedades transmitidas por el agua o por los insectos, caracoles y otros animales de sangre fría.
Es probable que los cambios del clima prolonguen las estaciones de transmisión de importantes enfermedades transmitidas por vectores y alteren su distribución geográfica.
El paludismo depende mucho del clima. Transmitida por mosquitos del género Anopheles, el paludismo mata a casi 600 000 personas cada año, sobre todo niños africanos menores de cinco años.
Los mosquitos del género Aedes, vector del dengue, son también muy sensibles a las condiciones climáticas.
Los estudios al respecto llevan a pensar que el cambio climático continúe aumentando el riesgo de transmisión del dengue.