El material más duro existente, que se deforma sin romperse, es más conductor que el cobre y permite la impresión de circuitos electrónicos en su grosor mínimo, es también el mas ecológico, porque puede reducir casi cien veces la materia prima de los aparatos de tecnología de consumo.
Se trata del grafeno, una estructura compuesta exclusivamente de carbono, cuyo aislamiento (por primera vez en 2004) revolucionó a la comunidad científica e inició una carrera empresarial, entre otras muchas innovaciones posibles, por crear una pantalla táctil con el grosor de uno sólo de sus átomos.
Hasta ahora, "el único material con un rango de aplicaciones tan amplio es el plástico", explicó a EFE el investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), España, Paco Guinea, experto en el estudio de las propiedades del nuevo material.
"Un dispositivo de grafeno requiere mucho menos material que uno convencional, quizá menos de la centésima parte", asegura el experto sobre el tejido por el que recibieron el premio Nobel de Física 2010 los rusos Andre Geim y Konstantin Novoselov, de la Universidad de Manchester, en el Reino Unido.
Ejemplos como el de la posible pantalla dan una idea de la reducción de material y, por tanto, de residuos, que implicaría el uso del grafeno, al que se une el aumento de la potencia y versatilidad con respecto a procesadores convencionales, basados en silicio.
Mercurio, cadmio, plomo o cromo hexavalente son algunos de los materiales peligrosos que contienen los actuales equipos electrónicos.
El modelo de vida actual está haciendo aumentar la demanda y la producción de aparatos eléctricos y electrónicos de consumo diario,lo que supone el consiguiente aumento de los residuos derivados de éstos.
El silicio, material con el que se elaboran los micro chips de los ordenadores actuales y que ha dado nombre al valle californiano donde se concentran las empresas mundiales más importantes del sector, "Silicon Valley", no será sustituido por el grafeno a corto plazo, pero "hay elementos, como las pantallas, en las que el grafeno sí es aplicable", precisó Guinea.
El reciclaje de este nuevo material, al estar formado exclusivamente por carbono, no supone ningún problema, añade el investigador.
Ante la drástica reducción de material que apuntan los dispositivos elaborados con grafeno, se está considerando su uso en otros ámbitos, en los que la ganancia en masa es importante, como en la industria aeroespacial.
¿Cuándo? El experto predice que "habrá aplicaciones comerciales a gran escala seguramente dentro de un año".